Video: Estudiantes de Diseño de Moda de Cádiz dan otra vida a la ropa desechada de Madre Coraje

2022-05-29 08:15:25 By : Ms. janny hou

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Alumnos de la Escuela de Arte presentan una segunda colección del Proyecto Corahe, una experiencia sostenible y ecoeficiente con un fin social

Las prendas se pueden adquirir a través de la web de la ONG y ver físicamente en la sede de la institución

J. M. Cádiz, 29 Mayo, 2022 - 06:00h

En medio del desierto de Atacama, en Chile, hay una enorme cordillera formada por más de 100.000 toneladas de ropa usada que no para de crecer. Cada año se generan en el mundo 92 millones de toneladas de residuos textiles y entre el 75% y el 85% se queman o acaban en los vertederos, según datos de la Asociación Ibérica de Reciclaje Textil (Asirtex). En España terminan en el cubo de la basura 800.000 toneladas de ropa y complementos, el 90% del total del textil que se descarta cada año.

Aficionada a diseñar y a coser su propia ropa en sus momentos de ocio, Isabel Palma, responsable de Voluntariado de Madre Coraje en Cádiz lo vio claro: las prendas que depositamos en los contenedores de esta organización no gubernamental no sólo podían terminar revendiéndose, una vez reparadas e higienizadas, en algunas de sus tiendas, o reciclándose al peso. También podían servir para que aprendices de diseñadores les dieran una nueva vida, transformándolas en otras bien distintas después de un espontáneo proceso creativo. Sostenibilidad y ecoeficiencia, en definitiva, frente a la derrochadora y contaminante fast fashion, con el broche de un fin social.

En la Escuela de Arte de Cádiz (EAC) gustó tanto la idea que han repetido una experiencia prometedora de convertirse en un evento anual ya consolidado que a buen seguro terminará en pasarela y quién sabe si en la fundación de pequeños talleres locales en los que pueda abrirse el futuro de toda una generación de creadores.

Alumnas de segundo curso de los Estudios Artísticos Superiores de Diseño de Moda de la EAC presentaron esta semana la segunda colección del Proyecto Corahe, un conjunto de imaginativas prendas nacidas de la técnica del upcycling, que en español vendría a traducirse como suprareciclaje o sobrereciclaje. Una especialidad en boga que han practicado y dado al conocer al gran público algunos de los concursantes del televisivo Maestros de la Costura.

Algunos de los modelos confeccionados con ropa reciclada por las estudiantes de la Escuela de Arte. / Lourdes de Vicente

“El dinero recaudado con la venta de los diseños será íntegramente para Madre Coraje. Además, para las diseñadoras y diseñadores supone una gran satisfacción vender sus creaciones logrando así acercar al alumnado al mundo laboral real y abordar un nuevo target y un nuevo público para Madre Coraje”, explicó Tó Campos, profesor de Ecodiseño y Sostenibilidad de la EAC y coordinador de este proyecto con el apoyo de Miriam Godino Iglesias. Ángel Yuste, vicedirector de la EAC, presidió la presentación.

Partiendo de prendas de segunda mano como blusas, faldas, camisetas, vaqueros, gabardinas y pañuelos, Paula Fernández López, Carla Lozano, Paula Ruiz Mancilla, Nuria Ponce Quintero, Daisy Esther Penas Márquez, Sara Ruiz Moreno, Rafael Esquinas Siles, Ana García Ortega, Houda Gourmat, Nerea García Torres, María Villanueva Pérez, Cristina Martínez Moró, Laura Crespo y Blanca Puente han logrado diseñar “una colección arriesgada, con estilo y sostenible”, en palabras de sus mentores.

Una creación de Paula Ruiz. / E. A. C.

Fue precisamente la actriz Blanca Puente, en su papel vital de alumna de segundo curso de Diseño de Moda, quien hizo de portavoz de sus compañeras: “Lo hemos hecho con todo el cariño, aprendiendo y contribuyendo a que la asociación Madre Coraje pueda emplear los beneficios en su labor. Nos hemos implicado mucho y ha sido emocionante ver cómo de la nada, de una pila de bolsas de ropa desechada, conseguimos crear estas prendas, que las deconstruimos y las volvimos a construir. Ha sido complicado a veces porque no partiamos de un diseño determinado, sino que íbamos probando. Que se ponga a la venta es un aliciente, porque nos integramos en el mundo real”, dijo la actriz, que pretende enfocar sus conocimientos al mundo del vestuario del teatro y el cine. Su aportación a la colección es un elegante vestido hecho con las piezas de dos gabardinas.

Tres alumnos admiran uno de los conjuntos de este Proyecto Corahe 2022. / Lourdes de Vicente

“Estamos muy contentos de continuar con este proyecto, que ojalá dure mucho tiempo”, dijo Tó Campos. “Se trata de una iniciativa colaborativa, con una parte social desde el punto de vista del diseño. Porque los diseñadores no sólo hacemos productos de consumo, sino que también podemos intervenir en cambiar la sociedad a mejor, en este caso, haciendo que se consuma de otra manera”, añadió el profesor.

Paula Fernández se decantó por esta apuesta. / E. A. C.

“Sí que sería interesante que esta experiencia se convirtiese en un yacimiento de empleo. La moda del futuro tiene que ser sostenible. La moda rápida, de tendencia, que implica un consumismo excesivo y compulsivo se va a acabar porque es insostenible: nos cargamos el planeta. Por eso, preparar a los alumnos para que en el futuro puedan pensar en el diseño de una manera diferente es imprescindible. De hecho, la idea es que de esto se pudieran hacer pequeñas producciones, ya sea en asociación con Madre Coraje, que tiene un taller en el que ahora mismo lo que realizan son pequeñas piezas de patchwok, o colaborando con alguna asociación que tenga talleres de inclusión social... Otra alternativa es que las alumnas y alumnos pudieran crear en el futuro su propio taller”, explica Tó Campos.

Otros de los modelos diseñados por los estudiantes de la Escuela de Arte de Cádiz. / Lourdes de Vicente

“El proceso de diseño es completamente diferente al de una prenda convencional porque no partimos de materia prima, sino de desechos, de prendas que la gente ha depositado en los contenedores de Madre Coraje y que el alumnado ha rescatado para, a partir de ahí, crear otras, con lo cual no hay un diseño previo, sino que los alumnos se enfrentan directamente a su deconstrucción. Eso les sirve también parq ver cómo están hechas por dentro”, aclara el profesor. “Este año no sólo ha participado la asignatura de ecodiseño, sino también la de taller y confección, que ha conseguido mejorar mucho la calidad de los acabados. Y no sólo han trabajado en el diseño, sino también la manera de comunicarlo. Vamos a ver una serie de vídeos de la colección que se van a difundir por redes sociales. Además, hemos trabajado el tema del género y de la edad. Por eso hay modelos de todo tipo. Queríamos transmitir que todos somos iguales dentro de la diferencia”, añadió el coordinador del proyecto.

Un vestido hecho con camisas, de Rafael Esquinas. / E. A. C.

Todas las prendas están a al venta a precios más que asequibles a través de la web de Madre Coraje y permanecerán expuestas en la escuela para quien quiera verlas físicamente e incluso probárselas. “Este top lo he hecho con unos pantalones y la falda, con una cortina modelada con la técnica del moulage, sobre el maniquí, sin patrones, para que en función de las proporciones, se pueda mover. Se engancha con unos hilos y vas moviéndolos, como si fueran un títere, y ves sobre la marcha cómo va quedando”, explica María Villanueva Pérez a Isabel Palma.

Algunos de los alumnos, durante la presentación de la colección. / Lourdes de Vicente

“Aunque parezca lo contrario, lo que me ha llevado más tiempo ha sido la parte de arriba, porque ha sido una transformación desde cero, un proyecto que fue madurando con el tiempo y con los días. Ha sido un trabajo muy gratificante porque he desarrollado una parte de mí que no tenía del todo desarrollada. Son los retos los que lo consiguen”, resume María.

Muy cerca, otro conjunto de top y pantalón corto de inspiración deportiva parece estar homenajeando al Cádiz CF por su permanencia en Primera. Está confeccionado con una bufanda de hincha, unas calzonas, dos camisetas deportivas de un equipo de barrio y unos tirantes procedentes de una alfombra de baño. El top está a 30 euros y el pantalón, a 15. Es obra de Nuria Ponce.

La propuesta de Carla Lozano. / E. A. C.

Rafael Esquinas se ha decantado por un vaporoso vestido asimétrico armado por las botonaduras de tres camisas de hombre, según le explica a Isabel Palma, que no se pierde ni un solo detalle de la técnica utilizada por el estudiante.

“Ojalá a estas alumnas y alumnos se les encienda una bombilla y digan: me quiero desmarcar del círculo habitual de la moda”, comenta ilusionada la responsable de la ONG.

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