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Controlar de forma remota los cultivos, desarrollar cultivos resistentes al cambio climático, fortalecer la compra de productos "made in Paradise", crear un sector industrial especializado en la fabricación de productos para la salud, generar una gran alianza público-privada en torno al acero para diversificar y modernizar su producción, y, por supuesto, desplegar energías renovables, como el hidrógeno verde o la eólica marina.

Estos son algunos de los retos que afrontará la I + D + i autonómica para construir, de aquí a 2027, una nueva Asturias “verde y digital”. El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidad ha presentado este viernes la Estrategia de Especialización Inteligente de Asturias (S3), que establece los cinco ejes principales sobre los que pivotará la transformación económica del Principado en busca de fondos europeos. Son: agroalimentario, envejecimiento activo y saludable, patrimonio y biodiversidad, energía y circularidad, e industria inteligente y resiliente.

Dentro de cada uno de estos ejes hay un total de 22 desafíos, que a su vez se dividen en otros más específicos. Por ejemplo (y además de los mencionados): recuperar la carne como alimento esencial en la dieta humana, promover el cultivo de microalgas, abrir un Instituto Asturiano de Terapias Avanzadas, establecer un sistema científico para identificar nuevos sitios patrimoniales, unir el territorio en el base del Camino de Santiago, adecuar las infraestructuras al calentamiento global, digitalizar los procesos productivos, potenciar el grafeno para aportar nuevas propiedades a los materiales tradicionales, y apostar por la bioimpresión.

A continuación se detallan los 22 desafíos y algunos de los desafíos específicos incluidos en la estrategia, a los que ha tenido acceso este diario.

1. Comida asturiana, sana y segura. Los laboratorios de la región trabajarán para generar conocimiento sobre el microbioma y desarrollar nuevas tecnologías para detectar bacterias de interés. Otros objetivos son recuperar la imagen de la carne como "alimento esencial en la dieta humana"; promover productos vegetarianos y veganos; diseñar nuevas fuentes de alimentos a través de cultivos in vitro; Elaborar bioplásticos y nuevas estrategias de bioconservación para extender la vida útil de los alimentos y facilitar su comercialización; y predecir la evolución microbiana de los alimentos. Más medidas: crear etiquetas inteligentes, desarrollar marcadores tempranos para detectar enfermedades y plagas, monitorear de forma remota los cultivos mediante sensores remotos o drones y recuperar razas autóctonas.

2. Explotación sostenible de los recursos agrícolas y pesqueros. Algunos desafíos específicos en este campo son obtener variedades más resistentes al cambio climático, desarrollar técnicas agrícolas sostenibles económica y ambientalmente, minimizar los residuos generados por la ganadería y la pesca, reducir el uso de antibióticos y pesticidas e implementar técnicas de cultivo. de nuevos productos como algas y microalgas. Asimismo, el Principado pretende poner en marcha herramientas que analicen el estado, ubicación y dinámica evolutiva de los recursos naturales, incentivar la mejora de las condiciones de las masas forestales, institucionalizar el Banco de Recursos Genéticos del Principado e implementar tecnología “blockchain” en la cadena de suministro de madera. .

3. Desarrollo de talento y emprendimiento en áreas rurales. El Ministerio de Ciencia parte del análisis de que “el alto grado de envejecimiento del medio rural y la necesaria transformación del sector, a través de la profesionalización y digitalización, hacen que la atracción de jóvenes y calificados a la agricultura sea un tema central” ¿Cómo se logra este desafío? Por ejemplo, proporcionando incentivos económicos a las empresas agrícolas que contraten personal joven; e introduciendo los últimos avances tecnológicos en los planes de estudio de ciclos, titulaciones y másteres de FP relacionados con el sector.

4. Marketing digital desde el medio rural. Las empresas locales también deben digitalizarse. Y, para ello, el Gobierno regional se plantea como retos capacitarlos en canales de venta y generación de marketing y negocios, construir una identidad digital propia que conecte con el consumidor para reforzar la compra de productos "made in Paradise", impulsar la internacionalización de el sector agroalimentario, y desarrollar una “canasta básica digital del Paraíso” para competir con otras comunidades.

5. Productos y servicios para prevenir y tratar enfermedades de alta prevalencia en Asturias. El objetivo regional es claro: revertir la crisis demográfica –somos una de las regiones más antiguas del mundo–, “atrayendo profesionales” dispuestos a instalarse en el Principado. Pero, dado que hay 243 más de 64 por cada 100 menores de 15 años, el desafío también es convertir Asturias en una potencia sanitaria. En este sentido, Science propone desarrollar un sector industrial especializado en la fabricación de productos de salud, crear modelos de vivienda y atención que promuevan la vida autónoma, y ​​trabajar en la investigación, análisis y estrategias de control de pandemias, tan necesarias después del COVID.

6. Digitalización en la atención médica y diagnóstico precoz. Algunos de los retos que abordará la I + D + i asturiana son: predicción basada en inteligencia artificial, telemedicina, explotación de big data hospitalarios anonimizados, nueva gobernanza en el ámbito sanitario y transformación digital.

7. Investigación en terapias avanzadas. El Ministerio de Ciencia tiene previsto abrir un Instituto Asturiano de Terapias Avanzadas y posicionar a la región como "referente en la producción de terapias avanzadas consolidadas: piel, cartílago y oftalmología". En este contexto, el foco también estará en la incorporación de terapias celulares, en la identificación de nuevas dianas terapéuticas, en el desarrollo de tratamientos neurodegenerativos y en la personalización de tratamientos basados ​​en el estudio avanzado del genoma.

8. Apoyo a la investigación clínica: infraestructuras y personas. Se adecuará el HUCA para la realización de ensayos clínicos sobre terapias avanzadas, se promoverá la creación y expansión de granjas de investigación, se realizarán simulaciones avanzadas en biomedicina y se buscará capacitación psicológica para el personal de enfermería, atención primaria y especializada.

9. Conservación de ecosistemas naturales: fauna y flora silvestre. Los desafíos son, entre otros, cuantificar y comprender los procesos involucrados en los efectos del cambio climático en los ecosistemas marinos y terrestres; desarrollar planes regionales que aumenten la resiliencia al calentamiento global; promover bases científicas para manejar / erradicar especies invasoras; y desarrollar sistemas y tecnologías de información para prevenir perturbaciones de origen antrópico, como incendios y derrames.

10. El patrimonio cultural e histórico-artístico como motor de crecimiento económico. El principal desafío es conseguir que el patrimonio cultural e histórico-artístico, seña de identidad de Asturias, "sea considerado un motor de crecimiento económico y fijación de la población en los territorios alejados de las zonas centrales". Para lograrlo, es necesario establecer un sistema científico de identificación de nuevos sitios patrimoniales, "investigando la existencia de elementos no descubiertos o poniendo en valores y características no reconocidos hasta la fecha". La prioridad a medio plazo es "su rigurosa catalogación, investigación y divulgación científica", haciendo uso de las nuevas tecnologías.

11. Desarrollar Asturias como destino turístico inteligente y sostenible. La propuesta es poner en valor la red viaria tradicional e histórica de Asturias a partir del Camino de Santiago "con el objetivo de unir y articular el territorio desde un elemento cultural". También prevé incrementar la eficiencia energética de las empresas turísticas e introducir inteligencia artificial y herramientas TIC para difundir el patrimonio y gestionar los destinos turísticos.

12. La digitalización como clave de la industria creativa. Entre los desafíos más específicos se encuentran: utilizar el análisis de big data para capturar las tendencias de los usuarios y clientes; optimizar las redes sociales como herramientas de conexión con sus usuarios; desarrollar nuevas plataformas de intermediación; industrializar procesos con alto componente manual o creativo; y promover la difusión de la cultura en todo el territorio a través de diferentes circuitos de programación (artes escénicas, música, artes plásticas, literatura ...) y medios de comunicación.

13. Consumo y producción eficiente de energía limpia para la industria. Se trata de adecuar las infraestructuras al cambio climático y fenómenos meteorológicos extremos, mejorar la sostenibilidad energética de la industria metalúrgica, abandonar el uso de combustibles fósiles mediante el despliegue de energías renovables, lanzarse a la energía eólica marina flotante, utilizar herramientas de análisis de electrificación de flotas, promover generación de electricidad a partir de fuentes renovables en la fabricación de productos, reciclar baterías y adaptarlas para una segunda vida, y promover el papel de la ciudadanía como motor de la transición energética.

14. Hidrógeno verde. Uno de los objetivos de Asturias es producirlo a un coste competitivo. En este sentido, se propone, por ejemplo, utilizar líquidos orgánicos e inorgánicos como vectores de transferencia de hidrógeno para el sector del transporte y la industria; convertir la región en un centro de producción y exportación de hidrógeno aprovechando los puertos; aumentar el consumo de hidrógeno con nuevas aplicaciones industriales y movilidad; capturar conocimiento sobre hidrógeno y desarrollar tecnología aprovechando los centros de la región; y crear una cadena de valor de equipos para producir hidrógeno verde.

15. Movilidad sostenible. Los desafíos incluyen la instalación de cargadores rápidos de alta potencia para el transporte eléctrico; desarrollar un modelo de simulación para predecir la demanda y la ubicación óptima de nuevos puntos de recarga; promover, mediante el uso de las TIC, un uso más racional de los medios de transporte, actuando para mejorar la gestión de las flotas por carretera; y reducir el consumo de energía del parque automotor.

16. Eficiencia energética en la construcción. Debemos apostar por sistemas de uso más eficientes, como aerotermia, geotermia, energía solar, biomasa sólida, pellets, bombas de calor ...; y la construcción de nuevos edificios NZEB (consumo de energía casi nulo); e integrando las energías renovables a nivel arquitectónico mediante, por ejemplo, un mejor aprovechamiento de los cerramientos (ventanas como concentradores solares).

17. Uso de corrientes de desechos en la industria de procesos. Aquí jugará un papel importante el combustible CSR alternativo que generará Cogersa a partir de 2023, una vez que entre en funcionamiento la nueva planta de clasificación de bolsas negras, que se estima tratará 340.000 toneladas de residuos mixtos al año y otras 75.000 toneladas de residuos industriales. . Este combustible tendrá distintas finalidades: recuperación de energía en calderas ordinarias de lecho fluidizado, gasificación y pirólisis. Otro desafío es establecer herramientas que permitan optimizar el uso de materias primas, prolongando su vida útil a través de segundas y terceras oportunidades.

18. Descarbonización del suministro de energía eléctrica y calor a la industria. Consiste en desarrollar tecnologías de captura de carbono, integrándolas en los propios procesos productivos; y potenciar la captura biológica. Es decir, biofijación con algas, reforestación, mantenimiento de cubiertas vegetales ...

19. Posicionamiento internacional de la fabricación de grandes componentes metalmecánicos. La idea es digitalizar y sensorizar los procesos productivos; aplicar inteligencia artificial para mejorar la eficiencia de los procesos productivos; hacer del acero uno de los factores de diversificación y modernización de nuestro tejido productivo, promoviendo la colaboración público-privada; desarrollar una plataforma para interconectar cadenas de suministro y / o comunidades de datos industriales; o promover otras infraestructuras público-privadas para validar y demostrar avances tecnológicos en la cadena de valor del acero.

20. Incrementar el valor añadido en la oferta industrial. Algunos desafíos son los siguientes: incrementar la competencia en la internacionalización de las empresas; desarrollar tecnologías habilitadoras que incrementen el valor agregado de los productos y servicios actualmente en el mercado; digitalizar productos para aumentar el valor percibido por el cliente; utilizar nanopartículas y materiales nanoestructurados, como el grafeno, con el objetivo de dotar a los materiales tradicionales de propiedades interesantes como una alta capacidad de almacenamiento de energía; y desarrollar materiales más ligeros, más reciclables y con mejor respuesta a la temperatura.

21. Impulsar la factoría flexible, eficiente y conectada. Trabajar en sensores industriales, integrando sistemas de tecnología de la información (TI) con sistemas de tecnología operativa (OT); y crear tecnologías que faciliten la interacción hombre-máquina.

22. Industrialización de la fabricación aditiva y la impresión 3D. Ante el “boom” que ha experimentado esta tecnología, el Principado quiere avanzar en la bioimpresión y fabricación aditiva en hormigón. El objetivo también es integrar la fabricación aditiva al resto de la producción y producir materias primas económicamente eficientes para esta tecnología.

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